LA PAREJA Y EL ENAMORAMIENTO.
Por: Psicoterapeuta Mónica Morales Rodríguez.


Cuando se conoce a alguien por primera vez y existe cierto interés, cada uno trata de mostrar lo mejor de sí mismo, es amable, cálido, atento… Hasta ese momento, no se tiene idea si existe compatibilidad con la otra persona puesto que se ocultan los aspectos negativos al no considerar aún si se establecerá una relación de pareja; tal vez pueda resultar atractiva la personalidad o el aspecto físico pero no se concibe un matrimonio, ni mucho menos formar una familia. Probablemente, exista una chispa de pasión que puede dar lugar al enamoramiento y, eventualmente, a una relación pero para llegar a ese punto se requiere de tiempo y, sobre todo, que la persona se de permiso de conocer realmente al otro y mostrarse tal cual es.
Cada ser humano inicia una relación utilizando un conjunto de herramientas que incluyen la personalidad, rasgos de carácter, valores y costumbres, todo ello inculcado tanto por su sistema familiar como por la cultura en la cual se desarrolla como individuo. Partiendo de esto, cada cual percibe y construye su mundo de una manera muy particular y es de vital importancia darse el tiempo para estar al tanto de cómo piensa la otra persona, cómo actúa bajo diversas circunstancias, cuáles son sus valores y muchos aspectos más que ayudarán a saber si es compatible, no sólo en el aspecto cotidiano, sino en la ideología y en la forma de ver el mundo y la realidad.
Conocer a otra persona es, en ocasiones, complicado y puede llevar bastante tiempo lograrlo puesto que la tendencia es mostrar la mejor cara, evitando dar a conocer el llamado lado oscuro que, dicho sea de paso, a veces ni nosotros mismos conocemos. Es el tiempo y la convivencia lo que va dando la confianza y la certeza para poder abrir aquello oculto y mostrarse tal cual, esperando –de modo inconsciente- que el otro acepte estas características
pues es de ese modo y no de otro, como realmente se piensa y se actúa. Lógicamente, cuando el individuo se presenta sin máscaras se pueden experimentar situaciones incómodas al ser objeto de enfrentamientos y rechazos, mismos que se tratan de evitar a toda costa porque se es sensible a estas críticas y se busca la aceptación de los demás; es por ello que la mayoría de la gente trata de mantener y preservar un "Yo" público apropiado que, sin embargo, no puede sostenerse durante mucho tiempo ya que la esencia verdadera se muestra, siendo objeto de las evaluaciones externas.
El paso del enamoramiento al amor propiamente dicho, es cuando cada uno de los integrantes de la pareja, se encuentra listo de poder convivir con el otro, contemplando tanto sus aspectos positivos como negativos y sabiendo hacer frente a estas circunstancias de la mejor manera.

Comentarios

  1. Eso es tan cierto! Y conforme el tiempo pasa, las crisis se hace más agudas y hay que estar ciertos en lo que se desea y el compromiso con esa otra persona (que fríamente ni de tu familia es jijiji) para poder llevar la relaciòn a otro nivel. Me gustó mucho tu post.

    ResponderEliminar
  2. Considero que han existido muchas generaciones en las cuales de manera inconsciente se va dando esta identificación de "sombras" o de partes de nuestro lado obscuro, y considero que es debido a que no se nos enseña a conocernos a nosotros mismos, no existe propiamente un proceso educativo a este respecto, la educación formativa e informativa raramente incluye estos aspectos, y cuando intentamos relacionarnos intimamente entramos en conflicto y actuamos de manera estereotipada...

    Muy interesante el articulo y desde Cozumel espero poderte escuchar y seguir leyendo...
    Gracias

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

EL RESPETO POR LA INDIVIDUALIDAD

¿Por qué no cumplo lo que prometo?

PENSAMIENTOS IDEALIZADOS SOBRE EL AMOR